La madera ha sido la flor y nata de las casas elegantes a lo largo de la historia. Y es que sus acabados, su tacto, el brillo y la sensación que inspira ha sido del gusto de todo el mundo. Seguro que en casa de tus abuelos hay o había muebles de madera a los que les tienes un cariño especial.
En fin: la madera gustaba y sigue gustando y en Ikiwi te vamos a proponer algunos trucos para que sepas cómo limpiar los muebles hechos de este material. Arrancamos.
Evita el amoníaco
¡Cuidado! Es más que probable que vayas a la droguería o al supermercado y te encuentres con doce productos aptos para limpiar muebles de madera.
Al fabricante de dichos productos le da igual que la madera de tus muebles vaya deteriorándose. Por ello, si es de cierta calidad y tienes previsto tenerla durante muchos años más, mira bien en la etiqueta para comprobar que el producto no tenga amoníaco. ¡Huye de él!
Como empresa de limpieza sabemos lo que nos decimos. El amoníaco es apto para muchos materiales, pero no para la madera más delicada: aunque tras usarlo veas que el aspecto es magnífico, si compararas el mueble en ese momento con el de dos años después te darías cuenta de la diferencia… Y para entonces ya sería demasiado tarde.
Cómo limpiar muebles de madera: ¡a sacar brillo!
La madera es elegante, en parte, porque es brillante, incluso la más opaca. Con el tiempo es muy fácil que este brillo desaparezca, convirtiéndose el mueble entonces en una pieza aparentemente vieja y de poca calidad.
Evita que esto pase sacando brillo de forma periódica a tus muebles. Y lo mejor de todo es que no necesitas gastarte mucho dinero, ya que las soluciones para limpiar muebles de madera que te vamos a dar aquí las podrás preparar en casa:
#1 Limpia la madera con aceite de almendra
Mezcla en un recipiente apto 10 ml de aceite de almendra y 10 ml de agua tibia (tibia, no caliente; podrías hacer que el aceite perdiera sus propiedades).
Entonces humedece un paño seco de algodón en ella y extiéndelo por la superficie de la madera que quieras limpiar. Pásalo sin miedo por las posibles grietas que te vayas encontrando, o por los bordes sin pulir.
Déjalo secar. No hace falta ni que pases un paño con agua o húmedo para eliminar la mezcla. Esta, lo que hará, es darle al mueble un brillo sinigual y suavizará aquellas zonas irregulares, es decir, las partes del mueble en las que la madera se ha abierto, presenta rayas, etc.
#2 Aceite de oliva y zumo de limón
Tan fácil como mezclar en una taza una parte de aceite de oliva y una igual de zumo de limón, 50/50. Sigue el mismo proceso que te acabamos de explicar y… ¡Voilà! Tus muebles de madera ganarán en brillo y al mismo tiempo habrás pulido las imperfecciones de los mismos.
#3 Para los muebles de baja calidad… amoníaco
Deteriora la madera, sí, pero hay muebles de no mucha calidad cuyo deterioro es más rápido que el que podría provocarle el amoníaco.
Por ello, como abrillantador funciona de miedo, te vamos a proponer esta mezcla de amoníaco con claras de huevo a punto de nieve. Como lo lees.
Crea la mezcla, extiéndela con un paño seco por el mueble y mira su forma de brillar cuando se seque. Es posible que tengas que pasar un paño ligeramente humedecido para eliminar los restos que hayan podido quedar; tenlo en cuenta.
Limpieza de muebles opacos
Los muebles de madera más opacos también deben ser limpiados cada cierto tiempo para no perder su particular belleza.
Para ello te vamos a proponer una mezcla de aceite de oliva con un chorrito de vino tinto. Sin más. Moja un paño de algodón seco en tu solución y extiéndela por la madera; verás qué buenos resultados da. Y todo, recuerda, con elementos que tienes por casa de normal.
Limpieza de muebles de madera barnizada
Estos muebles sobreprotegidos también requieren cuidados. Para ellos te vamos a sugerir una mezcla de aceite de oliva, que como ves se lleva genial con la madera, y de alcohol. El mueble recuperará el brillo y las rayas, si no son muy grandes, se suavizarán e incluso eliminarán.
Limpieza de muebles de mimbre
Terminamos con el mimbre, no tan común como otras maderas pero sin duda presente en muchos de los hogares de nuestro país, tanto en interiores como en exteriores.
Para limpiar el mimbre solo tendremos que echar mano de nuestro socorrido bicarbonato de sodio, el multiusos particular. Impregna bien el paño de algodón y repasa toda la superficie de mimbre. Deja secar unos minutos, luego limpia con otro paño humedecido en agua, seca y listo. ¡El mimbre te quedará reluciente!
No te la juegues con la madera de tu oficina
Estos trucos caseros son ideales para limpiar muebles en casa. En la oficina, en cambio, te recomendamos que cuentes con una empresa de limpieza de oficinas profesional.
¿Por qué?
Porque los profesionales saben optimizar la relación calidad/tiempo. Dejarán los muebles estupendos en un tiempo récord, de modo que la oficina quede reluciente cada vez que el personal de limpieza haga sus tareas. Si estás buscando alguien que se encargue de ello, contacta con nosotros para que te hagamos un presupuesto 100% a medida.
¡Hasta la próxima!
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